Si estás buscando cómo cuidar la dieta siendo intolerante a la lactosa, debes saber que este tipo de intolerancia es cada vez más común entre los seres humanos. Pero no debemos dejarnos engañar por su nombre.
¿Cómo cuidar la dieta?
La intolerancia a la lactosa dejará fuera de tu dieta varios alimentos. Pero no te asustes, existen muchos otros para reemplazarlos y también muchos que consumías y podrás seguir incorporando sin ningún problema:
1. Frutas, verduras y hortalizas
Todo aquello que conforma el mundo de las frutas, verduras y hortalizas podrás continuar consumiéndolo sin ningún tipo de inconveniente. En el caso de las frutas, estas contienen azúcares, pero no aquellos a los que eres intolerante, así que podrás tomar 5 raciones de estos al día sin problema y digerirlos bien.
2. Legumbres, cereales y tubérculos
En este caso existen algunos contraindicados, como ser las sopas que tengan agregados de leches, u otros productos lácteos. Entre los panificados, el pan común podrás usarlo sin inconvenientes, pero es conveniente evitar el pan de molde, que también suele ser amasado con leche.
3. Carnes, pescados y huevos
En el caso de los huevos, todos son permitidos, mientras que en el mundo de las carnes, preferentemente que sean magras. Las carnes procesadas pueden afectar a la persona intolerante, como puede ser todo tipo de carnes de charcutería, como chorizo, salchichón y jamón de york entre otros.
4. Frutos secos
Todos los tipos de frutos secos son indicados para personas con este tipo de afección.
No solo porque son una buena fuente de energía, sino porque además contienen una importante ración de calcio, algo cuyos niveles en la gente intolerante a la lactosa suele ser bajo, debido a la falta de consumo de lácteos, en donde más se encuentra.
5. Alimentos dulces
La gran mayoría de los alimentos dulces, como jarabes, mermeladas y caramelos en su mayoría no están contraindicados. Si te gusta el chocolate, debes buscar aquellos que no tengan leche, es decir, que tengan un mayor grado de pureza.
6. Bebidas
Lo mejor es aguas, caldos e infusiones, pero acorde a tu tolerancia podrás tomar también bebidas alcohólicas de baja graduación y café.
7. Leches
Las leches de animales están completamente contraindicadas. Existen leches sin lactosa, o leche de soja y sus derivados, como el tofu, que podrás tomar sin problemas.
¿Qué es la lactosa?
Se denomina lactosa a un tipo de azúcar que se encuentra en la leche y en sus derivados lácteos y se puede hallar tanto en productos industriales como naturales.
Mientras que en los productos naturales, como la leche de vaca, de cabra o de oveja, la encontraremos como azúcares naturales, en los productos industriales proviene de los conservantes.
Es por eso que no solo los lácteos tienen lactosa, sino que también lo pueden tener algunas carnes procesadas y salchichas entre otros.
La lactosa está presente en una gran cantidad de alimentos que consumimos a diario, por lo que, si sientes que tomas un café con leche para comenzar el día y todos los días sientes algún tipo de molestia estomacal, es muy probable que se deba a esto.
También se encuentra en los cereales enriquecidos, por lo que una leche con cereal de desayuno sería una pésima decisión para un intolerante a la lactosa.
¿Qué nos hace intolerantes a la lactosa?
- Existe una enzima a la que se denomina Lactasa, que es la encargada de facilitar la absorción de lactosa en el intestino delgado, con el objetivo de mejorar la metabolización del mismo.
- Una buena proporción de esta enzima hará que nuestro cuerpo sintetice la lactosa de buena manera, sin generarnos ningún problema.
- Pero cuando el cuerpo produce una lactasa que no cumple su rol metabólico o directamente ni siquiera la produce, en este caso estamos frente a la intolerancia a la lactosa.
Tipos de intolerancia
Existen vatios tres tipos de intolerancia a la lactosa, la Hipolactasia adquirida, la Intolerancia Secundaria o temporal y la Intolerancia congénita:
1. Hipolactasia adquirida
Se denomina hipolactasia adquirida a aquel tipo de intolerancia a la lactosa que se obtuvo de manera progresiva y por la falta de lactasa en nuestros organismos. Hace falta que el nivel de este llegue a muy bajo para que se manifieste el trastorno.
Reducir el consumo de lactosa a un nivel en el que sea tolerable, o directamente erradicarlos, será el tratamiento y esto tendrá que ser de esa manera durante toda la vida.
2. Intolerancia secundaria o temporal
Este es un tipo de intolerancia que surge a raíz de algún otro inconveniente y se puede manifestar de por vida, debido a que la afección también lo es o puede durar solamente por un lapso de tiempo.
El daño intestinal, en este caso, se genera por problemas entre los cuales destacan la celiaquía, algún tipo de cirugía, infecciones intestinales, enfermedades inflamatorias, malnutrición, fuertes diarreas o consumo de antibióticos.
3. Intolerancia congénita
Este tipo de intolerancia viene con nosotros, pues se padece desde el nacimiento, cuando el bebé no puede tolerar la leche materna. Es fundamental en este caso ver las diferentes reacciones del bebé en el momento de amamantarlo.
Sabiendo cómo cuidar la dieta siendo intolerante a la lactosa, tendrás una vida más sana y sin malestares constantes.